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Durante el 2021 se han ejecutado 137 demoliciones de construcciones ilegales en el suelo rústico de Mallorca

Durante el 2021 se han ejecutado 137 demoliciones de construcciones ilegales en el suelo rústico de Mallorca

(16/04/2022)

  • En el 93% de los casos la ADT ha reducido las sanciones porque las demoliciones se han hecho por los propietarios dentro del plazo voluntario establecido.
  • La actividad de la ADT ha generado 2,5 millones de euros a los ayuntamientos en concepto de tasas e impuestos de construcciones.

La actividad de la Agència de Defensa del Territori en 2021 ha provocado 137 demoliciones de construcciones ilegales en suelo rústico, el mayor número anual de demoliciones ejecutadas hasta ahora. La anterior cifra más elevada fue el año 2019 que fueron 124.

En los últimos 5 años se han llevado a cabo 541 demoliciones en toda la isla de Mallorca. El 93% de las cuales se han podido acoger a las reducciones de la sanción que establece la ley, porque han sido ejecutadas por los propietarios dentro del plazo voluntario para hacerlo.

La mayoría de los municipios donde se han ejecutado más demoliciones siguen siendo los que delegaron sus competencias a la ADT en el momento de su creación el año 2009, es decir los ayuntamientos de Algaida, Marratxí y Montuïri, ya que han sumado más expedientes tramitados a lo largo de estos doce años.

Hay que remarcar que la actividad de la Agencia ha provocado también la presentación de 150 proyectos de obra de legalización o de restablecimiento al estado anterior durante el 2021, que suman un total de 759 proyectos en los últimos 5 años (2017/2021). Lo que ha generado para los ayuntamientos de Mallorca unos ingresos aproximados de 2,5 millones de euros en concepto de tasas e impuesto de construcciones. Se trata proyectos que no se habrían presentado sin la intervención de la Agencia porque los propietarios pretendían llevar a cabo las obras de forma ilegal sin informar a las administraciones.

La Agència de Defensa del Territori continúa su trabajo que contribuye a la protección del territorio y el paisaje, haciendo cumplir las normas urbanísticas y territoriales vigentes en cada momento. Al mismo tiempo, la ejecución de las obras de restablecimiento que provoca la ADT da trabajo al sector de la construcción y genera nuevos ingresos para los ayuntamientos de Mallorca.